jueves, 10 de junio de 2010

Ante la insensibilidad, otro tipo de estrategias

El rechazo de algunos jefes de tenencia de la región Oriente de Michoacán para participar en los cursos de masculinidad a fin de contribuir a erradicar el machismo y la violencia intrafamiliar, es un claro referente de lo mucho que resta por hacer para lograr un cambio a favor del desarrollo de las mujeres.
Las autoridades involucradas allá en Zitácuaro no deben desalentarse, ese sería un gran error, por el contrario, hay que seguir insistiendo y en su caso dar un cambio en la estrategia para captar el interés de estos sectores de la población.
Un ejemplo es Mérida, Yucatán, donde se divulgan los derechos de las mujeres indígenas en papel para tortillas, y se hace tanto en lengua maya como en español.